No es por accidente, sino por la naturaleza, que las tres más famosas atracciones de Río de Janeiro son maravillas naturales. En este paseo visitará el sorprendente Cristo Redentor que está ubicado en el pico de la montaña del Corcovado a 700mts. sobre el nivel del mar. Para llegar hasta allí cruzaremos los barrios de Laranjeiras y de Cosme Velho, llegando a la estación del tren del Corcovado, donde iremos a bordo de un tren de hierro durante 15 minutos, atravesando la selva de la Tijuca la mayor selva urbana del mundo. Ya en lo alto de la montaña, los visitantes quedarán encantados con la construcción de la estatua de 36 metros con espectacular vista de 360º de la ciudad. El itinerario de vuelta será a través del Túnel Rebouzas, que nos llevará a la Laguna Rodrigo de Freitas, un lago espejado, cercado de construcciones residenciales, preciosas mansiones, verdes colinas y jardines exóticos. Regreso al hotel.